6 factores que influyen en la formación de tu imagen corporal

Este articulo lo vuelvo a publicar un año más tarde para que puedas refrescar la memoria y recordar todo lo que te contaba referente al ideal de belleza y cuales son los factores que influyen en la construcción de tu propia imagen corporal y  lo puedas poner en relación con los artículos relacionados con la autoestima que he publicado este mes de abril dentro del proyecto «Tus Emociones de la A a la Z».

Tu cuerpo representa una parte importante de lo que eres bien como mujer o bien como hombre. Todos nos hemos preocupado en algún momento de nuestra vida por cómo nos ven los demás. Seguro que en alguna ocasión te has sentido “bien” con tu cuerpo pero también incómodo o incluso “mal”. Aceptar tu imagen corporal contribuirá a que disfrutes de una autoestima sana y equilibrada. Para ello es necesario que sepas qué significa y que factores influyen en su desarrollo.

Empezaré con la definición de imagen corporal. Según Rosen (1992) tu imagen corporal se refiere a cómo percibes, imaginas, actúas y sientes con respecto a tu propio cuerpo, es decir, cómo representas en tu mente tu cuerpo.

Esta representación mental tiene tres componentes:

  • Perceptual: es la precisión con la que percibes el tamaño, la forma y el peso de tu cuerpo.
  • Afectivo – cognitivo:  representa lo que piensas, lo que sientes y cómo valoras tu tamaño, tu peso, la forma general de tu cuerpo o alguna parte específica de él.
  • Conductual:  son las conductas derivadas de la percepción, sentimientos y pensamientos referidos a tu cuerpo.

Así es que tienes una imagen corporal positiva si …Anorexia

  • Percibes tu cuerpo de una forma ajustada a la realidad.
  • Sientes satisfacción por tu cuerpo, lo aceptas y lo valoras.
  • Entiendes que tu imagen corporal solo es un elemento más de tu valor como persona.

Tienes una imagen corporal negativa si …

  • No percibes la forma, el tamaño o el peso de tu cuerpo de forma ajustada a la realidad, dando lugar a subestimaciones o sobreestimaciones.
  • Sientes insatisfacción hacia tu cuerpo produciéndote bien ansiedad, vergüenza, rabia o disgusto.
  • Pones excesiva atención en la imagen corporal como elemento esencial de tu valía personal.
  • Tu insatisfacción te puede llevar a :  evitar la playa, comprobar en exceso delante de un espejo el tamaño o la forma de tu cuerpo o una parte del mismo o  vestir ropa de “camuflaje” para disimular zonas que te producen malestar.

¿Tu imagen corporal siempre es la misma?

No naces con una imagen corporal, esto quiere decir, que no es un elemento innato del ser humano. Pero a medida que vas creciendo, vas interiorizando la imagen tu cuerpo:

  • Entre los 4-5 meses, cuando eres bebé comienzas a diferenciar a tus cuidadores, los objetos externos y su cuerpo.
  • Entre los 2 y 3 años comienzas a relacionarte con el medio ambiente mediante actividades físicas y el control de esfínteres. Y comienzas a reconocerte en el espejo.
  • Entre los 4 y 5 años comienzas a utilizar tu cuerpo para describirte.
  • En la adolescencia el cuerpo es una fuente de identidad y de autoestima que puede dar lugar a mayor o menor satisfacción.

6 factores que influyen en la formación y desarrollo de tu imagen corporal

Son los varios los factores que contribuyen en desarrollar la imagen corporal que tienes de ti mism@.

  1. El concepto de belleza depende de la cultura y del momento en que vives. Dependiendo del momento histórico y de la cultura en la que vivas, la belleza representa conceptos diferentes.

Comprueba cómo ha ido cambiando el concepto a lo largo de la historia:

  • Egipto: la mujer egipcia debía ser delgada, caderas anchas, pechos pequeños, y empleaban las joyas y bisuteríaImagen_67_Canon_belleza_imagen_corporal_28_04_2015 pararesaltar su belleza.
  • Grecia: para los griegos la belleza residía en la armonía y perfección de las proporciones. La mujer griega debía ser robusta y con poca sensualidad y el ideal masculino estaba basado en un cuerpo de atleta.
  • Edad Media: el ideal de mujer en el Medievo tenía que representar la pureza mediante tez, manos y cuello blanco, frente ancha, caderas estrechas y torso, nariz y ojos pequeños.
  • Renacimiento: vuelve la belleza clásica. La mujer renacentista debía tener manos, pies y dientes muy blancos. Los ojos, las cejas y pestañas muy negras. Y las uñas, los labios y las mejillas rojos. Y el ideal masculino está representado por la imagen que todos conocemos de el «David» de Miguel Ángel.
  • Barroco: durante el siglo XVIII, tanto hombres como mujeres emplearon pelucas y empezaron con el uso de perfumes, carmín, peinados muy exagerados, zapatos de tacón, lunares postizos. La mujer barroca debía tener pechos prominentes, caderas anchas, brazos carnosos. ¿Te acuerdas de las “Tres gracias” de Pedro Pablo Rubens? Ellas representan el ideal femenino de la época.
  • Durante siglo XIX, es la higiene personal el símbolo que representa la belleza.
  • A partir del siglo XX comienzan a producirse una serie de acontecimientos que influirán en la manera de observar el cuerpo femenino. Las mujeres luchan por sus derechos cívicos y políticos. Aparece la cirugía estética, la depilación del vello, el bronceado del cuerpo, la incorporación de la mujer al trabajo. Y aparecen el cine y los medios de comunicación en masa representando los modelos ideales de belleza.

¿Quieres ver como eran esos ideales de belleza a través de la historia ?

¿Y ahora? En la actualidad, en nuestra cultura occidental, el modelo ideal femenino exige una delgadez extrema y el modelo masculino potencia hombres con músculos, hombros anchos y rasgos de la cara angulosos.

Imagen_66_Mujeres_del_mundo_imagen_corporal_28_04_2015

¿Pero en todas las sociedades actuales la belleza es igual? No, el ideal de belleza cambia. Te animo a que explores las siguientes culturas: las mujeres “jirafa” en Birmania, las mujeres etíopes, las adolescentes de Papúa Nueva Guinea o las mujeres Tuareg, no te dejarán indiferente.

Además en el siguiente enlace podrás disfrutar del «El atlas de la belleza», precioso reportaje fotográfico donde podrás disfrutar de la belleza de las mujeres correspondiente a 37 países.

  1. Tu familia: en el seno familiar aprendes a comportarte, a relacionarte y mediante el ejemplo de tus padres aprendes a desarrollar la idea que tienes sobre ti mismo y tu imagen corporal. Estos parámetros no son siempre los mismos en todas las familias. Quizás en tu caso, tus padres proporcionaban especial importancia al peso y a la figura delgada favoreciendo la dieta en casa, o por el contrario no se reparaba en los kilitos de más que pudieran tener los miembros de la familia.
  1. La adolescencia: cuando llegas a la adolescencia ya no eres un niñ@ pero tampoco un adult@. Debido a esta ambigüedad que experimentas unido a los cambios físicos que vives, resulta un periodo complejo. Buscas tu propia identidad, como parte de esa nueva identidad, existe una mayor preocupación por tu imagen corporal y como esta es aceptada o no por tus grupos de referencia.
  1. Tus amistades: las comparaciones que realices con tu grupo de referencia, como son tus amigos, influyen en la manera en la que te ves. Si eres aceptado, tus amigos serán una gran fuente de refuerzo positivo pero por el contrario, si eres o has sido víctima de burlas como “cuatro ojos”, “eres unas vaca”,”pinocho”,”soplillo” etc. esas críticas pueden influir de forma muy negativa en la construcción de tu imagen corporal, incluso durante la vida adulta.
  1. Tu autoestima: desarrollar una autoestima sana y equilibrada te permite considerar tu imagen corporal solo y exclusivamente como un elemento más del valor personal que cómo ser humano tienes. Si la imagen que ves en el espejo no se adapta al ideal de belleza que consideras que “debes” tener, es muy complicado que puedas sentirte bien con tu cuerpo y contigo mism@. Como dice Walter Riso (2010):

 “lo importante no es ser bell@, sino gustarse a uno mismo. La belleza es una actitud. Si te sientes guapo o guapa, lo eres, y eso transmitirás a los demás, pero si aceptas pasivamente el modelo de belleza que te imponen desde fuera, terminarás pensando que eres horrible”. 

  1. Los medios de comunicación: te transmiten constantemente a través de la publicidad, los estereotipos del ideal de belleza, te dicen cómo tienes que vestirte y cuál debe ser tu apariencia física fomentando “la lucha” contra el envejecimiento y el peso.

 Comienzan a existir voces que reclaman un tratamiento diferente  de la imagen corporal femenina y masculina en los medios, ya que es sabido por todos, la enorme influencia en nuestros adolescentes. La Fundación Imagen y autoestima  ha desarrollado un “Decálogo de buenas prácticas sobre  el fomento y la      imagen corporal en los medios de comunicación”. Si tienes 5 minutos, te recomiendo su lectura.

Pero no son las únicas voces que reclaman que no vivamos bajo la tiranía del peso y del «cuerpo 10». Recientemente un campaña de ropa interior ha reclamado que las curvas femeninas también son sexys, empleando modelos de tallas más grandes e invitando a las mujeres del mundo, cualesquiera fuera su figura, que  se fotografiasen delante de un espejo y colgaran en las redes sociales mediante el hastag #Imnoangel, que significa «yo no soy un ángel» en referencia a la famosos desfiles de una empresa de lencería femenina que utilizan como imagen a conocidas modelos que representan  el «ideal de belleza»  actual.

Es importante que te sientas a gusto con tu imagen corporal pero tienes que recordar que solo representa una parte de todo lo que tu eres y vales. No busques ser un ideal, se tu mism@ … aceptando lo que no te gusta y valorando lo que seguro si que tienes. Si quieres cuidar tu imagen corporal, trabaja por mantener hábitos saludables a través de la alimentación y de la práctica del ejercicio, contribuirán a tu bienestar emocional.

¡Feliz día!

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